Carol Camino: “La inteligencia artificial va a revolucionar las ayudas de baja visión”

En IMO Grupo Miranza somos pioneros, desde 2006, en ofrecer un servicio para que los pacientes con baja visión puedan disfrutar de una vida autónoma. Lo hacemos a través de tratamientos específicos de rehabilitación visual y con ayudas personalizadas.

Hablamos del presente y futuro de estas ayudas con Carol Camino, óptica optometrista y responsable del Área de Baja Visión de la sede barcelonesa de IMO Grupo Miranza.

¿A quién afecta la baja visión?

Generalmente, afecta a personas con patologías oculares graves, como la DMAE, el glaucoma , la retinosis pigmentaria o la retinopatía diabética. Son pacientes que han perdido parte de la visión y no pueden recuperarla con técnicas quirúrgicas ni terapias farmacológicas.

En este sentido, la baja visión implica tener:

• una agudeza visual (AV) inferior a 0.3 (el 1 es el máximo de esta escala).
• un campo visual inferior o igual a 20 grados (la amplitud normal abarca unos 180 grados).

Además, hay varios tipos de baja visión:

• Leve (AV igual o superior a 0,3).
• Media (AV entre 0,3 y 0.2).
• Severa (AV entre 0,1 y 0,05).

 Asimismo, existe un estado visual previo, conocido como “visión frágil” (AV de 0.8 a 0.3), en el que el paciente comienza a notar en su día a día la afectación visual.

¿Es frecuente?

Sí, cada vez hay más personas con baja visión o “visión frágil”. Esto se debe, principalmente, a los siguientes aspectos:

• el envejecimiento de la población (en muchos casos, la pérdida de la calidad de la visión va asociada a la edad).
• el avance de los tratamientos quirúrgicos y farmacológicos, que han evitado muchos casos de ceguera.

¿Y cómo ayudamos a los pacientes con baja visión?

Nuestro objetivo es que estos pacientes puedan aprovechar al máximo el resto de su visión. 

Para ello, contamos con un área especializada en la que ofrecemos:

• Ayudas específicas (ópticas, no ópticas y electrónicas) para facilitar el día a día de los pacientes.
• Estudio y rehabilitación personalizados.
• Un equipo de ópticas optometristas expertas en baja visión.

¿Qué avances o novedades están por venir en lo que se refiere a las ayudas de baja visión?

¡Estamos avanzando mucho! Principalmente, destacaría las nuevas posibilidades que ofrece la inteligencia artificial: 

• El dispositivo OrCam MyEye, por ejemplo, es un asistente auditivo que transmite, de forma instantánea, información visual importante para la vida cotidiana (leer textos, reconocer caras, identificar productos,orientarse, etc.). Es una revolución.
• Otro que avance que viene son los bastones inteligentes. Identifican objetos cercanos y ofrecen mucha seguridad, ya que detectan obstáculos, imposibles de percibir con un bastón convencional. Es una tecnología emergente que ayudará mucho a los pacientes.

¿Recuerdas alguna historia o paciente que te haya llamado marcado?

¡Son muchos años y muchas historias! Podría destacar estas 2:

• Francisco Mulet, un paciente con ceguera por retinosis pigmentaria, al que implantamos el chip de visión artificial Iris II (el primero en España). Llevamos a cabo un exhaustivo programa de rehabilitación visual para que aprovechara al máximo de esta revolucionaria tecnología.
• Los hermanos Ivanna y Diego, pacientes con distrofia de conos. Ella, por ejemplo, utiliza lupas y otros apoyos electrónicos para estudiar y, gracias a ello, puede dedicarse a lo que le gusta.

Eres vicepresidenta de la SEEBV – Sociedad Española de Especialistas en Baja Visión- y eres cooperante internacional…

Sí, estoy muy implicada en diferentes proyectos e iniciativas, dirigidas a ayudar a pacientes nacionales y, también, en el tercer mundo. ¡Incluso he viajado a África o Sudamérica para ayudarles!

Por ejemplo, este viernes 17 de junio, he ayudado a organizar una propuesta muy original: un concierto benéfico “a ciegas”, cuya recaudación irá destinada a la investigación científica contra la ceguera. 

5 consejos para un paciente con baja visión

1. Visitar al oftalmólogo y saber el resto de visión que le queda.
2. Acudir a un especialista en baja visión y establecer un plan personalizado.
3. Ser constante con las revisiones periódicas, la rehabilitación y el uso de ayudas.
4. Utilizar filtros selectivos y polarizados para evitar problemas o molestias, como el deslumbramiento.
5. No perder la esperanza; nos encaminamos a un futuro de grandes avances.