Las personas con retinopatía diabética proliferativa pueden reducir el riesgo de ceguera en un 95% con el tratamiento adecuado

Según el Dr. García-Arumí, las personas con retinopatía diabética proliferativa pueden reducir el riesgo de la ceguera en un 95% con un tratamiento y seguimiento adecuados. El control de los factores de riesgo es también muy importante. El principal de ellos es la hiperglucemia, hay que mantener controlados los niveles de azúcar en sangre, ya que este factor puede retrasar el inicio y el progreso de la retinopatía diabética. El Dr. Navarro explicó los síntomas y la prevención de la salud ocular con consejos prácticos sobre la retinopatía diabética.

El Dr. Mateo detalló los diagnósticos y pruebas para pacientes diabéticos y qué se consigue con cada uno de ellos: angiografía fluorescénica de campo amplio (Optomap), panretinofotocoagulación, PAttern SCAn Laser photocoagulation (PASCAL), tomografía de coherencia óptica (OCT), inyecciones intraoculares de esteroides o anti-VEGF -factor de proliferación vascular.

Dr. Garcia Arumí de IMO concluyó la sesión hablando sobre el control y los tratamientos de la retinopatía diabética.

Los temas que se trataron en la conferencia giraron entorno a los propósitos del tratamiento de la retinopatía diabética. El objetivo principal es mejorar la calidad de vida y reducir el deterioro visual del paciente diabético a través de una detección precoz que es muy importante, como en todas las enfermedades, y un tratamiento oportuno. El tratamiento quirúrgico de la retinopatía diabética es la fotocoagulación láser, las inyecciones intravítreas de fármacos o la vitrectomía.

• En el caso de la fotocoagulación láser, se utiliza cuando el paciente sufre estos dos tipos de retinopatía diabética: edema macular y retinopatía proliferativa, generalmente. El edema macular supone un acumulo de líquido en la parte central de la retina que sale de las lesiones vasculares desde el torrente sanguíneo. De este modo, el láser trata de cerrar la alteración vascular aplicando calor, así la lesión se coagula y cierra, y no se escapa el líquido.

• Las inyecciones intravítreas son muy útiles sobre todo en el caso del edema macular, pero también en algunos casos asociados a la vitrectomía para que exista menos riesgo de sangrado en el postoperatorio. Son nuevos tratamientos que han demostrado un grado considerable de efectividad. Hay dos tipos: corticoides, que son fármacos antiinflamatorios muy utilizados en medicina y antiangiogénicos, que precisan inyecciones frecuentes.
• En cuanto a la vitrectomía, se trata de la cirugía que se realiza en casos más avanzados, cuando existe hemorragia vítrea, desprendimiento de retina o bien tracción sobre la mácula.